lunes, 31 de agosto de 2015

Análisis cuento "Un día perfecto para el pez banana" de J.D Salinger



Un día perfecto para el pez banana, es un cuento publicado en el periodo de post guerra 1949, en donde se relata y se va contando de una forma más bien dinámica lo que es la historia de una joven pareja, de la cual el marido, el Sr. Seymour Glass sufre de alguna enfermedad psicológica (dicho textual en el cuento “mal de la cabeza”) producida a mi parecer luego de participar y combatir en la guerra, en donde vio y experimento en carne propia los horrores de está. Y como esto lo consume lentamente al punto de suicidarse.
Entrando de lleno a analizar el cuento, en la primera parte de este se nos presenta a una de los personajes centrales del cuento, la cual es Muriel, esposa del Sr. Seymour. Se nos muestra de buenas a primeras a nosotros los lectores como una mujer normal que está de vacaciones. Esta protagonista, Sra. Muriel, habla por teléfono con su madre desde un hotel, lo cual no nos dice mucho, más bien se trata de una conversación común y banal, pero poco a poco son estos diálogos entre madre e hija los que nos van dando y aportando ideas, sobre los protagonistas, especialmente sobre el Sr. Seymour Glass y nos transportan a lo primordial, a lo central de este cuento.
 La historia da un vuelco sorprendente, al pasar de una simple conversación entre una madre y su hija a enterarnos de la existencia de un tercer personaje (el cual ya veníamos dando luces de su existencia), el protagonista de esta historia, el Sr. Seymour Glass, y de los trastornos o problemas mentales que este posee.
Además es también a través de esta conversación telefónica que conocemos y se exponen  algunas de las características de la Sra. Muriel, esposa del Sr. Seymour veterano de guerra. Se la muestra a ella como una mujer joven, despreocupada y superficial, que quiere vivir con su esposo al que tanto espero que volviese vivo de la guerra y la cual hace caso omiso de las advertencias que su madre muy preocupada le da y se hacen visibles en la llamada telefónica que mantienen. A raíz también de esta conversación telefónica conocemos a la madre de Muriel, una mujer que está sumamente preocupada por el bienestar de su hija, sobre todo por estar cerca de  Seymour, un hombre que está mal de la cabeza y que le podría hacer daño a su hija, sobre todo luego que consultase el padre de Muriel con un psiquiatra y también tomando en cuenta aquellos eventos pasados en donde Seymour perdió la cabeza y que sirven como antecedentes para estar aun más preocupada por su hija.  
En este punto de la historia, solo quieres conocer ¿Quién es Seymour?, ¿Dónde está?, y si de verdad ¿está mal de la cabeza?
La historia nuevamente nos sorprende, de la plática telefónica que desarrollaban Muriel y su madre, pasamos a otra escena en la playa, donde una madre le coloca protector solar a su hija, que al parecer es una niña, quien quiere ir a ver a “Ver más vidrio”. Esta madre luego de untarle el protector solar a su hija se va dejándola libre que vaya a la playa a jugar, para ella poder ir a pasar el rato con sus amigas. Es aquí donde finalmente conocemos a Seymour o mejor dicho según la niña Sybil a (a quien la madre le untaba protector solar) “ver más vidrio”.
Seymour está en la playa acostado en la arena, cuando llega esta niña al lado de él y comienzan a platicar manteniendo una conversación fluida, donde también se puede vislumbrar que Seymour socializa muy bien con los niños, no tan solo con Sybil sino también con otra niña llamada Sharon la cual se menciona como una pequeña que se sienta al lado de él cuando este toca piano en el hotel y a la cual Sybil le tiene celos por estar cerca de Seymour. Quizás la inocencia de estos le atrae y es también una contradicción con lo vivido en la guerra en donde la inocencia no existe. Seymour y la niña Sybil son personas muy imaginativas, el habla sobre la existencia de  un pez banana que entran en un pozo a comer bananas y que son mus sucios, al principio parecen ser peces normales pero luego se transforman en criaturas  hambrientas, de cierta manera es una comparación con lo que el experimento en la guerra, con los antivalores de las personas y sus ganas y ansias de poder.  Y ella por otro lado dice verlos, por su naturaleza, por su esencia en otras palabras por el hecho de ser una niña.
Luego de ver al pez banana Seymour sale del mar produciendo otro quiebre en la historia, entra al hotel, al ascensor y piensa que una señora le ha mirado los pies de una manera curiosa y burlona, él le llama la atención y ella baja del ascensor. Seymour aún extrañado por la situación entra a su habitación, busca un revólver, ve por última vez a su esposa y se mata, con un certero disparo en la sien.
Es en este camino de la playa al hotel que algo tuvo que haberse producido en la cabeza de Seymour, se va generando un cambio en su mente, va perdiendo poco a poco el sentido de la realidad cediéndole el paso a sus monstruos internos a que sus alucinaciones se vayan apoderaron de él, a tal punto que se quite la vida.
Lo que me genera al leer el cuento fue que a Seymour lo consumió el sentimiento inevitable de terror y desesperanza tras vivir en carne propia los horrores de la segunda guerra mundial en donde combatió, y donde pudo presenciar  la maldad der ser humano y lo que este puede crear para la destrucción de los demás, de sus pares solo para obtener más reconocimientos, poder y dinero que es lo que guían al mundo, a nuestras sociedades hoy en día.  Nos muestra la necesidad que posee Seymour de escapar a una dimensión más pura e inocente como por ejemplo la de los niños, como la que vivía con su pequeña amiga Sybil o Sharon. Pero ese escape a otra dimensión culminará inevitablemente en observar a su alrededor y darse cuenta que es inevitable ignorar su realidad. Llevándolo irremediablemente a su colapso, a no querer vivir más en un mundo así, en una sociedad deshumanizada, por ende lo lleva a su muerte. 


Bienvenidos a mi blog! 
Mi nombre es Débora Sepúlveda Rojas y soy estudiante de Trabajo social de la Universidad Católica del Maule.
Este blog fue creado para responder a una necesidad de la certificación que elegí para este año la cual es "producción y publicación de textos académicos y profesionales", y que tiene como objetivo principal el opinar y analizar distintos textos literarios, en donde todos podamos discutir y reflexionar sobre estos, entregando un análisis profundo que permita entablar una discusión en torno a estos.

Es por ello que este blog estará abierto y a la disposición de todos aquellos que quieran discutir y compartir sus opiniones sobre los textos que aquí se analizaran.
El ver desde perspectivas diferentes un mismo texto, compartir opiniones, entablar diálogos y discusiones en torno a los textos literarios que se analizaran es lo que se busca y lo que espero se genere.